Los aperitivos fríos son mis favoritos en estas épocas del año, sobre todo cuando las temperaturas suben de manera cruel y las olas de calor inundan cada rincón de casa. Antes de irme de vacas regresé al Mercado Agro de Malasaña y compré un repollo baby super cuco, así que colocando la compra en la nevera pensé que me apetecía hacer algo con él en crudo, ya que como sabrás ésta es la mejor manera de consumir las verduras para que mantengan sus propiedades intactas.
INGREDIENTES PARA 4 ROLLITOS
- 2 patatas medianas
- 1 zanahoria
- 1 rodaja de remolacha cruda
- media rama de apio
- 1 puñado de aceitunas verdes deshuesadas
- hojitas de verdolana
- 1/4 de cebolla
- 3-4 cucharadas de mayonesa casera (usa veganesa si quieres realizar tu versión vegana)
- Hojas de repollo, col o lechuga según tu gusto
- Sal y pimienta
- aceite de oliva virgen extra
INSTRUCCIONES
1. Pon agua a cocer en una cazuela con una pizca de sal. Agrega las patatas con piel (previamente lavadas y perforadas en algunas zonas). Deja a fuego durante 40 minutos aprox (hasta que estén tiernas). Escurre, deja que templen, pela y reserva.
2. Pica finamente las verduras (apio, zanahoria, cebolla, remolacha y aceitunas), colócalas en una fuente junto a las patatas cortadas en dados. Salpimenta y rocía con unas gotitas de aceite.
3. Añade la mayonesa y mezcla hasta que se integre con todos los ingredientes.
5. En un recipiente con agua muy caliente y un poco de sal, coloca las hojas de repollo o col previamente lavadas y deja de escalden unos minutos para que se pongan más tiernas. Escúrrelas y sécalas con ayuda de un paño limpio.
6. Monta tus rollitos con las hojas y el relleno, cierra cada rollito con un palillo y antes de servir, rocía cada rollito con un aliño hecho con una cucharadita de aceite de oliva, un chorrito de limón, una pizca de sal y una pizca de jengibre en polvo.