Los días que una se pone a cocinar de manera improvisada suelen ser geniales cuando consigues un plato delicioso con muy pocos ingredientes, saludable y rapidísimo de preparar. Y el experimento de hoy ha resultado encajar a la perfección con este concepto, así que voy a compartir contigo esta ratatouille ‘a mi manera’ que hemos almorzado el fin de semana. He utilizado sólo 4 vegetales, salsa de tomate y un poco de queso vegano, y el resultado ha sido maravilloso.
La ratatouille es un plato bastante famoso de origen francés que suele cocinarse con verduras cortadas en rodajas y dispuestas en una fuente redonda rectangular, todo guisado al horno. Como os he comentado un poco más arriba, este plato ha surgido de la improvisación y lo he hecho con los vegetales y las especias que tenía por casa, así que no se ajusta de manera extricta a la receta original pero creo que no tiene nada que envidiarle en cuanto a sabor. Como puedes observar en las fotos, mis verduras están cortadas muy finas porque he utilizado mandolina, sobre todo para acelerar el proceso de preparación (he tardado literalmente 5 minutos en cortar todos los vegetales), pero si no dispones de mandolina puedes cortar a cuchillo con un poco más de paciencia, te recomiendo que pongas especial interés en hacer las rodajas de patata muy finas, porque es lo que más tardará en hornearse. ¡Vamos al lío!
RATATOUILLE
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INGREDIENTES
- 1 calabacín
- 1 berenjena
- 2 patatas medianas
- 1 cebolla
- Salsa de tomate casera
- Queso tipo cheddar (yo he usado una variedad vegana)
- Sal y pimienta
- Aove
- Tomillo y romero
INSTRUCCIONES
- Cortamos todos los vegetales en rodajas muy finas, preferiblemente ayudándonos de una mandolina. Los colocamos en un cuenco amplio, rociamos con aceite de oliva con sal, pimienta, tomillo y romero y masajeamos con las manos limpias para que las verduras se impregnen del aliño.
- Untamos la base de una fuente con salsa de tomate y vamos colocando las rodajas de vegetales a nuestro gusto. Si utilizas una fuente rectangular puedes formar filas y si lo haces en una fuente circular puedes disponer las rodajas en espiral.
- Una vez colocadas añadimos un chorrito extra de aceite y untamos un poco de salsa de tomate entre los vegetales.
- Horneamos a 180º durante 45 minutos con cuidado de que no se doren demasiado los vegetales. Si es necesario cubre la bandeja con un poco de papel vegetal.
- Cinco minutos antes de sacar del horno colocamos unos dados de queso cheddar, también podemos utilizar parmesano rallado o cualquier queso de nuestro gusto a elección.
- Cuando el queso esté fundido retiramos del horno y servimos caliente con un poco de quinoa cocida con ajo y laurel.
