Veggie Boogie Salir del modo de lector

MUFFINS DE REMOLACHA Y CONFINAMIENTO

¡Hola caracola! Llevo unas cuantas semanas sin aparecer por aquí porque lo cierto es que estoy pasando por una extraña fase (bueno, yo y prácticamente el resto del planeta, así que me entenderás perfectamente). Resulta que estoy escribiendo mi primer post para este blog en aislamiento, confinamiento, cuarentena o estado de alarma por el ya archiconocido mundialmente Coronavirus. Todo es bastante complejo y difícil de explicar, pero me apetece haceros mi pequeña reflexión sobre cómo me estoy sintiendo estos días, y qué mejor manera para ponerme a escribir que con un buen café y uno de estos muffins veganos de remolacha, chocolate y pasas.

Es una receta muy sencilla, el resultado es denso y con un sabor bastante intenso a remolacha y cacao, sé que estoy un poco pesada con este mix porque un par de post atrás te proponía este bizcocho de remolacha, pero estos dos ingredientes son básicos en casa y ahora que estoy haciendo la compra con mucha menos frecuencia por el confinamiento, he aprovechado lo que tenía en la despensa y así han surgido estas pequeñas delicias que te recomiendo que pruebes muchísimo, porque tienen menos ingredientes y son menos laboriosas que el bizcocho y además, totalmente veganas.

MUFFINS DE REMOLACHA, CHOCOLATE Y PASAS

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Raciones: 8 uds Tiempo total: Cocinado:

INGREDIENTES

INGREDIENTES SECOS

1 cup de harina de trigo/espelta/trigo sarraceno
1 cup de harina de almendras
1 cucharada de levadura
1 pizca de sal rosa
5 cucharadas de cacao en polvo

INGREDIENTES HÚMEDOS
1 remolacha grande cocida
1/3 cup de sirope de agave
1 cup de bebida almendras/soja/avena
2 cucharadas de aceite de coco/oliva

TOPPINGS
Tropezones de chocolate o nibs de cacao
Pipas de calabaza crudas
80 gr de pasas o arándanos deshidratados

INSTRUCCIONES

Colocamos los ingredientes húmedos (junto con el cacao en polvo) en un recipiente y batimos con la batidora de mano hasta obtener una mezcla homogéna.
En otro recipiente mezclamos los ingredientes secos menos el cacao (que ya lo hemos agregado a la mezcla húmeda).
Pasamos los ingredientes secos al recipiente de los húmedos y con ayuda de una espátula o cuchara de madera vamos mezclando con movimientos suaves y envolventes. Echamos las pasas, mezclamos un poco más y vamos colocando la mezcla en un molde para muffins previamente engrasado o cubierto con cápsulas de papel.

Decoramos con las pipas y con el chocolate picado y horneamos a 180º entre 13-15 minutos. Sacamos del horno y dejamos que templen sobre una rejilla. Podemos guardar en el frigorífico para su mejor conservación y consumimos en los siguientes 3-4 días. SALUT!

Y en cuanto a mi pequeña reflexión en relación al confinamiento, lo cierto es que estoy teniendo un montón de sensaciones dispares. Supongo que es totalmente normal sentirse feliz y agradecida y al mismo tiempo estar triste y con una corrosiva incertidumbre sobre lo que este virus puede llegar a suponer para muchas personas. El tema económico también es otro gran problemón, pero yo ahora mismo sólo pienso en la cantidad de personas que están sufriendo, en la heroica hazaña de todos los trabajadores sanitarios expuestos a un estrés inconmensurable, y en todas las personas que salen diariamente a trabajar para que muchas otras (entre las que yo me incluyo) podamos tener a nuestro alcance todo lo necesario para nuestra supervivencia y confort doméstico.
Sé que soy una privilegiada (al menos por el momento) porque mi única obligación como ciudadana es quedarme en mi casa y ser responsable, dispongo de todo lo que necesito en casa para abordar mis actividades con cierta normalidad y encima tengo la suerte de vivir este aislamiento en compañía de mi pareja ¿qué más puedo pedir? Sé que nada, pero la verdad es que estoy ansiosa por poder ver a mis hermanos aquí en Madrid, por ir a ver a mis padres a Gredos (ellos son los que más preocupada me tienen por su edad), emborracharme con mis amigos como si no hubiera un mañana y poder sentir esa sensación de libertad que nunca antes me había planteado que tendría que restringir de una manera tan tajante.

He tenido días malos y otros bastante buenos, pero si hay algo que se está repitiendo de manera automática cada vez que me levanto de la cama por las mañanas es una sensación de falta de concentración absoluta. En estas semanas me estoy sintiendo incapaz de trabajar con el mismo rendimiento y eso me genera un poco de agobio porque siento que mis días son nulos en términos de productividad. No estoy inspirada y la creatividad en cualquiera de mis oficios es fundamental, tanto en mi faceta gráfica con en la de creación de contenido para este proyecto. Pero quiero ser positiva y pensar que esto también traerá cosas buenas y, en mi caso, nuevas vías de expresión y lenguaje para mis creaciones, estoy segura de ello.

En cuanto a mis rutinas, en estos momentos en los que se me han caído proyectos y no recibo mails con propuestas ni con encargos, he decidido dedicarme (o al menos intentarlo) a la creación de obra personal para mi tienda online y a darle forma a un nuevo ebook de recetas que quiero compartir pronto, siempre que la inspiración no quiera abandonarme por un tiempo muy prolongado. Procuro mantenerme activa haciendo ejercicio diario en casa, dedico un rato cada día a organizar y limpiar mi casa para sentirme cómoda en mi madriguera y estoy intentando hacer cosas que me hagan sentirme bien, entre ellas leer muchísimo más que antes, hablar cada día con mis seres queridos, tomar el sol con las ventanas abiertas mientras realizo ejercicios de respiración y dibujar mucho para no perder la práctica diaria.

Y algo que no falta en mi día a día es la buena música para amenizar cualquier situación y para llenarme de energía positiva. Así que voy a dejarte mis últimas dos playlists aquí por si quieres empaparte de buen rollo mientras estás en casa. Espero que tu cuarentena esté siendo lo más sencilla posible, que te encuentres bien y que tu gente esté a salvo, esto pasará y podremos salir a las calles a celebrarlo por todo lo alto, te mando besos y abrazos imaginarios desde mi cueva.