Las magdalenas caseras, también conocidas como muffins, son perfectas para desayunar o merendar si tienes ganas de un dulce saludable. Su aporte calórico es bastante inferior al tradicional o a las industriales y además son mucho más naturales puesto que las hemos cocinado únicamente con ingredientes de procedencia ecológica (aunque esto es opcional). Hace un tiempo me regalaron unas cápsulas con motivos florales que tenía muchas ganas de utilizar, así que esta mañana lluviosa y fría era la idónea para estrenarlas. Estas magdalenas de chocolate, plátano, pasas y avena son veganas (no incluyen ningún ingrediente de procedencia animal) y por lo tanto también son aptas para intolerantes a la lactosa. La elaboración es muy sencilla y puedes alterar un poco los ingredientes a tu gusto. Una vez frías guárdalas en un recipiente hermético para que no pierdan su textura esponjosa y tierna y consúmelas en 3-4 días. Yo las he acompañado de un té de especias de Jordania a media mañana y ha sido todo un acierto 😉
INGREDIENTES PARA 18 magdalenas pequeñas
- 200 gr de harina integral de espelta (o de trigo)
- 3 cucharadas de copos de avena integrales suaves
- 1 sobre de levadura de repostería
- 90 gr de azúcar moreno ecológico
- 90 gr de panela
- 100 ml de aceite de girasol
- el puré de 2 plátanos maduros
- 80 ml de leche de arroz (o cualquier otra leche vegetal)
- 1 puñado de pasas
- 1 puñado de nueces pecanas
- 1 cucharada de canela en polvo
- 1 cucharada de jengibre en polvo
- 2 cucharadas de cacao puro desgrasado en polvo
- Pasas, nueces, copos de avena, crocanti de almendras, rodajas de fresa natural y cacao en polvo para decorar
Sácalas del horno y deja que enfríen en una rejilla. Cuándo estén frías ya están listas para consumirlas, puedes acompañarlas con té, café, frutas o comértelas solas sin más, el sabor es delicioso, dulce pero nada empalagoso y con una textura muy esponjosa.