Hoy es viernes y eso hay que celebralo! Al menos yo hoy si, que voy a salir bien tempranito de la redacción y voy a empezar el fin de semana mucho antes de lo habitual, jejejeje… Y no sé vosotros, pero a mi no se me ocurre mejor manera para darle la bienvenida que con un buen plato de estos increíbles mac and cheese veganos, buahhh están taaaan ricos que vas a querer repetir varias veces.
Esta versión de los clásicos macarrones con queso ha sido todo un descubrimiento, el sabor es delicioso, la textura super cremosa y lo mejor de todo es que la sensación después de comer no es, ni de lejos, tan pesada como la que te dejan los tradicionales. Además ahora me he hecho muy fan del crispy tofu, os prometo que es adictivo y le va como anillo al dedo a la receta. Si también sois adictos a la pasta y queréis descubrir alternativas más ligeras y saludables, la propuesta de hoy os va a emocionar, no os la perdáis! Porque lo bueno si es fácil, es más guay jejeje…Yo, como ya me conozco, he hecho 4 raciones que, aunque somos dos en casa, seguro vamos a repetir a lo largo del finde. Y además, tengo intención de visitar la expo temporal de Sorolla en Madrid, que si voy ya os contaré mis impresiones. Feliz día para todos!
INGREDIENTES PARA LA SALSA (4 RACIONES)
- 2 cup de calabaza en dados al vapor
- 1 cup de anacardos crudos e hidratados
- 250 ml de leche de avena
- 1 diente de ajo grande
- 2 cucharadas de cebolla en polvo
- 1/2 cup de levadura nutricional
- El jugo de medio limón
- Sal y pimienta al gusto
- 1 cucharadita de nuez moscada en polvo
- 300 gr de plumas de pasta orgánicas o “macaroni”
INGREDIENTES PARA EL CRISPY TOFU
- 250 gr de tofu natural o ahumado
- 50 ml de salsa de soja clara
- 50 cl de sirope de agave o de arce
- 1 cucharada generosa de pimentón de La Vera
- 1 cucharadita de aceite de oliva vírgen extra
- 1 pizca de sal rosa del Himalaya
- Si utilizas el tofu natural puedes añadir una cucharadita de humo líquido o en polvo para darle sabor ahumado
INSTRUCCIONES
1. Primero vamos a preparar el crispy tofu ahumado (también conocido como “bacon tofu“), así lo dejamos listo mientras cocinamos el resto ya que se puede consumir a modo de topping frío. Puedes hacer cantidad, guardarlo en un bote de cristal y utilizarlo para aderezar diferentes platos ¿no te parece genial? Para ello, desmenuzamos el tofu y añadimos todos los ingredientes mencionados más arriba en un cuenco hasta que quede bien impregnado (es importante intentar que los grumos de tofu queden más o menos del mismo grosor para que todos se hagan por igual, si dejas unos más grandes o más pequeños, se te van a chamuscar por partes si los quieres doraditos. Esto es justo lo que me ha pasado a mi, por eso mi recomendación es triturar el tofu en picadora para que quede uniforme).2. Precalentamos el horno a 170º y vamos colocando el picadillo de tofu aliñado en una bandeja apta para horno forrada con papel vegetal. Horneamos hasta que esté dorado y crujiente (yo lo he dejado unos 25 minutos).
3. Retiramos del horno, dejamos que temple, lo guardamos en un frasco de cristal hermético y reservamos.4. Ahora vamos a prepar la salsa vegana de “queso”. En primer lugar ponemos los anacardos en un cuenco con agua hirviendo y los dejamos unos 30-40 minutos para que se hidraten y estén más tiernos.
5. Pelamos y troceamos la calabaza, la cortamos en dados y la cocinamos al vapor hasta que esté blandita.
6. Una vez hecha la calabaza, colocamos todos los ingredientes para la crema indicados más arriba (menos las plumas de pasta) en el vaso de la batidora o en un procesador de alimentos y batimos hasta conseguir una crema densa. Ves probando para comprobar si necesita más sal y/o especias y, si te queda muy espesa, rebaja con un poco más de leche (si te queda muy líquida puedes añadir más levadura nutricional o un poco más de calabaza si te ha sobrado).7. Mientras batimos la salsa ponemos a cocer la pasta en una cazuela con agua hirviendo, una hoja de laurel, una pizca de sal y una pizca de pimienta. El tiempo de cocción dependerá del tipo de pasta que utilices, a mi me gusta dejarla “al dente”, que no quede demasiado blanda.
8. Escurrimos la pasta y la volvemos a vertir en la misma cazuela junto a la crema. Mezclamos bien para que se integre todo y salpimentamos de nuevo si fuera necesario.9. Servimos bien caliente con un poco de crispy tofu y orégano seco y a disfrutar! Yo además, he acompañado mi ración de pasta con un super zumo de remolacha, naranja y plátano que me ha sobrado del desayuno. La experiencia ha sido religiosa, yeahhh! La receta original es de Malin, autora del blog Good Eatings (yo la he variado un pelín pero el grosso del resultado final es muy parecido), me encantan sus recetas veganas y todo lo que hace, sus viajes, sus vídeos, sus consejos de vida saludable… Si no la conocéis os recomiendo mucho que le echéis un vistazo a su web, es maravillosa!
2 comentarios
¡Tiene una pinta brutal! Voy a intentar hacerla la semana que viene 🙂
Yeah!! Si la haces ya me contarás, a mi me gustó mucho el resultado 😀 Besos guapa!