Últimamente estoy descubriendo infinidad de posibilidades para realizar hamburguesas vegetales. Las legumbres son perfectas para ello y hoy me apetecía mucho probar con alubias pintas. Acostumbrada al típico potaje de judías no estaba segura de si el sabor me iba a resultar atractivo, pero debo decir que el experimento ha sido muy grato y que estas hamburguesas de alubias, calabaza, pimiento y cebolla están simplemente deliciosas. Las verduras y las especias puedes modificarlas a tu gusto, la elaboración es muy sencilla y creo que es una alternativa divertida para comer tus legumbres de un modo distinto. Esta receta también es apta para veganos y para intolerantes a la lactosa, espero que la probéis y que os guste! Yo las he cocinado al horno para que el aporte calórico sea inferior, pero creo que habría sido más acertado hacerlas en sartén con un poco de aceite, puesto que al hornear endurecen y quedan algo más secas, aún así estaban muy ricas!
INGREDIENTES
- 200 gr de alubias pintas ecológicas
- 1 hoja de laurel
- 1 pimiento rojo italiano
- 1 cebolla mediana
- 2 dientes de ajo
- 5-6 hojas de albahaca fresca
- 100 gr de calabaza
- 1 cucharada de harina integral de espelta (o de trigo)
- 100 gr de copos de avena integrales
- Media taza de leche de arroz
- 1 cucharada de levadura de cerveza
- 1 cucharada de pimentón de la Vera
- Sal del Himalaya y pimienta en polvo al gusto
- 1 cucharada de aceite de oliva
Ahora vamos a colocar nuestra calabaza troceada en láminas finas en la vaporera y cocinaremos al vapor entre 8-10 minutos, hasta que esté hecha pero no se deshaga. Una vez hecha retiramos y la hacemos puré con ayuda de un tenedor, salpimentamos y reservamos.
Cuando las judías estén hechas las escurrimos bien y las pasamos a un recipiente amplio. Ahora vamos a mezclar todos los ingredientes. Agregamos el sofrito, el puré de calabaza, una cucharada de levadura de cerveza en copos, los copos de avena y las hojas de albahaca. Batimos bien con una batidora de mano y agregamos la cucharada de harina, la media taza de leche y sal y pimienta al gusto. Ahora vamos a mezclar el resto de la masa con una cuchara de madera hasta conseguir una pasta homogénea. Si te ha quedado poco consistente añade más copos de avena y si está muy dura puedes incorporar un poco más de leche, un chorrito de agua o un poco de aceite de oliva. Si vas a hacerlas al horno (como he hecho yo) te aconsejo que la pasta no quede demasiado sólida, porque en el horno endurece y se reseca un poco. Esta masa la dejaremos reposar en la nevera al menos durante 1 hora.
Sacamos del frigorífico y precalentamos el horno a 170º con calor por arriba y abajo. Preparamos la bandeja de horno y la forramos con un papel vegetal que engrasaremos con unas gotas de aceite de oliva con ayuda de una brocha de silicona. Nos lavamos bien las manos y sin secarlas comenzaremos a formar bolas con la masa y las iremos colocando en la bandeja forrada. Las aplastamos un poco para darles la forma de hamburguesa y dejamos un poco de espacio entre ellas para que no se peguen unas con otras. Volvemos a mojar nuestra brocha en aceite de oliva y pincelamos las hamburguesas. Seguidamente espolvoreamos por encima un poco de orégano, sal y pimienta y unas semillas de sésamo crudas. Horneamos durante 15 minutos hasta que estén ligeramente doradas y listo! Puedes acompañar tus hamburguesas con una guarnición de patatas asadas, arroz, ensalada al gusto, o hacerlo al modo más tradicional y montarlas sobre pan con lechuga, tomate y cebolla, de cualquiera de las maneras estarán deliciosas!