Hay ocasiones en que las cosas más sencillas son las más acertadas. Esto puede aplicarse a comida y a cualquier ámbito de la vida, jejeje. ¿Para qué complicarnos con ciertas cosas cuándo lo mejor es simplificar? Pues la receta que te traigo hoy es la simplificación hecha bocadito crujiente. Estos crostini de boniato con pera y queso fresco granulado son super fáciles y el contraste de sabores es una locura. Te animo mucho a prepararlos porque estoy segura de que te van a encantar, además, si tienes invitados en casa es el aperitivo o entrante perfecto para inaugurar una buena comilona.
Esta semana ha sido un poco extraña por varias cosas, entre ellas, una fase de tos ronca que parece que nunca termina y que no me deja descansar por las noches. Parece que voy mejor y mi doctora no ve nada aparentemente preocupante, así que me estoy poniendo fina a infusiones aromáticas, miel bio y mucha vitamina C y la cosa se está suavizando, al menos esta noche he conseguido dormir del tirón sin ningún ataque de tos, yeah!
Por otro lado, me han surgido un par de proyectos super chulis vinculados a mi trabajo como artista del collage, que me van a quitar bastante tiempo los próximos dos meses, pero como soy una chica apañada y previsora, he estado dejando material en mi recámara para seguir ofreciéndote contenido por aquí también y que no me eches de menos, jejeje… Y ahora, sin más dilación, saca de tu despensa una pera y un boniato y al lío pato!
CROSTINI DE BONIATO CON PERA Y QUESO FRESCO
Imprimir
INGREDIENTES
- Medio boniato grande o 1 boniato mediano
- 1 pera
- 150 gr de queso fresco granulado bio
- Aceite de oliva
- orégano silvestre y romero fresco
- Sal rosa
- Pepitas de granada
INSTRUCCIONES
1. Pelamos el boniato y lo cortamos en rodajas finas. Precalentamos el horno a 170º y mientras vamos colando las rodajas sobre una bandeja de horno y las pincelamos con un poco de aceite de oliva, sal y pimienta al gusto.
2. Horneamos unos minutos hasta que empiecen a estar ligeramente doradas, sacamos del horno y colocamos sobre cada rodaja una cucharada de queso fresco en grumos, una lámina de pera (yo las he laminado con mandolina para que queden muy finitas), un pelín más de aceite de oliva (pincelamos la pera con una brocha) y orégano seco.
3. Volvemos a hornear unos minutos hasta que la pera también adopte un consistencia crujiente y sacamos.
5. Servimos calentitas con granada y romero fresco.
2 comentarios
Fácil y delicioso. He descubierto tu blog por casualidad, por aquí me quedo. Me encanta tu trabajo!
Muchísimas gracias y bienvenida! 🙂