Me encanta el sabor de la coliflor, creo que es mi vegetal favorito dentro de la familia de las coles. Hace unos días compré una buena pieza en un mercado ecológico y me apetecía utilizarla para hacer algo ligero y calentito para la cena. Así que me he puesto manos a la obra con esta crema de coliflor, almendras y tomates secos. Si a ti también te gusta llegar a casa por la noche (y por el día!) y disfrutar de un plato de cuchara estoy segura de que esta receta te va a gustar 🙂.El sabor es suave pero muy sabroso y la textura densa va perfecta con los tomates secos y los crujientes de verduras que añadimos al emplatar, una delicia casera súper fácil, rápida y saludable. Yo he preparado cantidad para consumirla varias veces, puedes guardarla en la nevera porque aguanta perfectamente 2-3 días y además se puede congelar. Si también te pierden las cremas y purés aprovecha ahora que aún no ha llegado el calor y utiliza las verduras que más te gusten, así son los pequeños placeres de la vida…
INGREDIENTES PARA 4 RACIONES
1 coliflor mediana
1 patata
Media cebolla grande (o una cebolla mediana)
2 puerros pequeños
100 gr de almendras crudas hidratadas
Aceite de oliva virgen extra
1 puñado de perejil fresco
Sal y pimienta al gusto
1 rama de romero
4 tomates secos hidratados en aceite
1 pizca de pimentón de La Vera
Como vamos a usar las almendras hidratadas debemos ponerlas a remojo la noche anterior en un recipiente hermético con agua purificada y cambiar el agua 2-3 veces, lo ideal es que drenen unas 8 horas (si no tienes tiempo puedes usar las almendras tal cual en crudo). Una vez hidratadas las colocamos bajo el grifo de agua fría, escurrimos bien y conservamos en la nevera en un bote de cristal. Con los tomates secos haremos algo parecido, los dejamos a remojo al menos 2-3 horas, más o menos hasta que doblen su tamaño, los escurrimos bien, los picamos y los rocíamos con aceite de oliva durante 60 minutos. Reservamos. Para hacer la crema vamos a necesitar una sola cazuela. Vertimos en ella una cucharada de aceite de oliva y sofreímos a fuego bajo el puerro troceado y lavado, la cebolla y el perejil picados con la tapa puesta durante 10-15 minutos (hasta que pochen). Pasado este tiempo echamos un chorro de vino blanco y dejamos otros 5-7 minutos. Mientras tanto lavamos bien la coliflor y la desmenuzamos en trozos pequeños. Pelamos la patata y la cortamos en dados. Echamos ambos ingredientes a la cazuela, agregamos también las almendras, salpimentamos, removemos bien y añadimos agua hasta cubrir las verduras, subimos el fuego. Dejamos que el agua hierva, probamos por si necesita más sal, bajamos de nuevo el fuego, tapamos y dejamos que las verduras se cocinen unos 30-40 minutos (hasta que la patata y la coliflor estén blanditas). Ahora batimos con ayuda de una batidora de mano hasta conseguir una crema densa (si te queda demasiado espesa puedes agregar un poco de agua, el punto final va al gusto).En una sartén con unas gotas de aceite de oliva vamos a dorar los tomates secos troceados durante 5-6 minutos, salpimentamos y reservamos. En la misma sartén doramos también por ambas caras unas lonchitas de coliflor y puerro hasta que adquieran una consistencia crujiente, salpimentamos. Servimos nuestra crema bien caliente, decoramos con los toppings crujientes, espolvoreamos un poco de pimentón y romero y a disfrutar!