Ahora que el frío está empezando a brillar por su ausencia mi cabeza no para de dar vueltas pensando en bebidas refrescantes para hidratar cuerpo y mente :D. Yo cada vez siento más rechazo hacia los refrescos envasados y cargados de azúcares, edulcorantes y conservantes, así que si prefiero sustituirlos por otros más sanos y naturales. Es muy habitual en mi decaer emocionalmente con la llegada de la primavera ya que padezco la irritante astenia primaveral que tanto me cuesta esquivar. Así que en estas fechas procuro tomar abundantes bebidas tonificantes y depurativas para sentirme más activa (infusiones, smoothies y aguas de frutas). Hoy os voy a hablar un poco sobre las aguas infusionadas, que además de estar deliciosísimas son una alternativa perfecta para ingerir líquido saludable y muy apetecible.Hay muchas variantes (tantas cómo imaginación quieras echarle), y con muy diversos y positivos efectos sobre nuestra salud dependiendo de cómo combines los ingredientes. Ya sabrás que somos un 70% de agua y que hay que beber al menos 1-2 litros diarios, así que si te cuesta tomarlos, con este tipo de aguas frescas puedes sentirte más apetente 🙂 Además le regalarás a tu cuerpo un buen chute de vitaminas y antioxidantes gracias a las propiedades de las frutas y las hojas, de hecho en inglés este tipo de bebidas se denominan “detox waters” por su efecto depurativo.Yo hoy me he preparado un par de litros de agua infusionada con pomelo, limón, pepino, cardamomo y té verde. Una delicia increíblemente fácil de elaborar, muy económica y con un sabor espectacular. El pepino es super hidratante, los cítricos nos ayudan a realizar una buena digestión, además de aportarnos la super vitamina C, y el té verde, entre muchísimas otras propiedades, es un poderoso antioxidante que además nos ayuda a calmar las odiosas alergias estacionales. Yo os presento la versión “saludable” sin endulzantes ni ningún otro aderezo, pero este tipo de aguas frutales pueden ser la base perfecta para nuestros cócteles, gin tonics, etc.
INGREDIENTES
- 1 pomelo y medio
- 1 litro y medio de agua
- 1 taza de té verde helado
- 1 pepino
- 1 limón
- Semillas de cardamomo
INSTRUCCIONES
1 – Pon agua en una cazuela y cuándo rompa hervir coloca 2 cucharadas de té verde a granel con un colador de té y mantenlo tapado hasta que temple. Vierte el té en una botella de cristal y guárdalo en la nevera hasta que esté bien frío.
2 – Lava bien las frutas y el pepino y córtalos con piel en rodajas finas (si puedes utilizar productos ecológicos mejor, así estarán libres de químicos).
3 – Exprime el zumo de un limón y el de medio pomelo.4 – En una botella o frasco limpio mezclamos el té con las rodajas de frutas y el zumo de limón y pomelo. Agitamos suavemente o movemos con una pajita con cuidado de no romper las láminas de fruta.
Añadimos las semillas de cardamomo (algunas enteras y otras machacadas).5 – Cerramos y metemos en la nevera al menos 2-3 horas para que el agua infusione con la fruta y se potencie su sabor.
6 – Sirve bien frío, puedes añadir un poco de hielo para que te resulte aún más refrescante.
4 comentarios
Qué buena pinta tiene! Mañana mismo lo pruebo 🙂
Genial Luis, qué alegría 😀 Un abrazo!
Esto tengo que probarlo.
yeahh!!